viernes, 28 de mayo de 2010

Dejemonos ser nosotros mismos


Para desactivar con amor, espacios de aparente conflicto, comparto con quién lo necesite, aquello en lo que creo:

Aquí va un fragmento de “Libérense ustedes mismos” de las “Obras Completas del Dr. Edward Bach” – “Bach por Bach” de Editorial Continente .
Al zambullirnos y navegar por ella , podemos encontrarnos con un material como éste: “tan simple, como la historia de la vida “… Gracias!



…Un niño pequeño decidió pintar el cuadro de una casa, a tiempo para el cumpleaños de su madre. En su mente infantil, la casa ya estaba pintada; sabía perfectamente cómo iba a quedar, hasta el más mínimo detalle, y sólo le restaba plasmarla sobre el papel.La pintura estaba terminada a tiempo para el cumpleaños. Apelando a toda su capacidad, él le ha dado forma a su idea de la casa. Es una obra de arte, porque todo es muy suyo: en cada trozo expresa su amor hacia su madre, y cada ventana, cada puerta, están pintadas con la profunda convicción de que ése, es el lugar correcto para ellas. Incluso pareciendo una parva de heno, es la casa más perfecta que fuera pintada alguna vez; y es perfecta porque el pequeño artista, ha puesto en ella todo su corazón y toda su alma. Todo su ser está encerrado en esa pintura.Esto es la salud, esto es el éxito y la felicidad, y esto es la verdadera vocación de servicio. Servir a través del amor, en la más perfecta libertad de seguir nuestro propio camino.

Así es que llegamos a éste mundo, sabiendo qué cuadro tenemos que pintar, y con nuestra senda ya trazada a lo largo de la vida; todo lo que nos queda por hacer en ella es darle forma material. Pasamos por la vida llenos de gozo e interés, concentrando toda nuestra capacidad en el perfeccionamiento de nuestro cuadro y volcando los mejores esfuerzos de nuestra capacidad para trasladar nuestros pensamientos y propósitos a la vida material, en cualquier entorno que hallamos elegido.

Entonces si seguimos desde el principio al fin nuestros propios ideales y deseos, con toda la fuerza que poseemos, no puede existir el fracaso; nuestra vida, saludable y feliz, ha sido un maravilloso éxito.



Sin embargo, la misma pequeña historia del niño-pintor puede ilustrar cómo, si lo permitimos, las dificultades de la vida pueden interferir con este éxito, felicidad y salud, y disuadirnos de nuestros propósitos.
El niño esta pintando, atareada y felizmente, cuándo alguien llega y le dice:
-”Porqué no ponés una ventana aquí y una puerta allá? Y por supuesto, el sendero del jardín debería ir hacia éste lado”.El resultado de ésta actitud en el niño será una total pérdida de interés en su trabajo; quizás lo continúe, pero entonces sólo estará poniendo ideas ajenas en el papel; tal vez se torne contrariado, irritado e infeliz, temeroso de rehusar las sugerencias.
Comenzará a odiar a la pintura, y quizás la rompa en pedazos; la reacción será de acuerdo con el carácter del niño.El dibujo final quizás sea una casa reconocible, pero es imperfecta, y un fracaso, porque es la interpretación de los pensamientos de otro, no los del niño. Y probablemente ya no tenga sentido como regalo de cumpleaños, por no haber podido ser terminado a tiempo, y la madre tendrá entonces que esperar posiblemente, un año más para recibir su regalo.
Esta es la enfermedad; la re-acción ante una interferencia. Es un fracaso y una infelicidad transitoria, y ocurre cuando permitimos a otros, que interfieran con nuestros propósitos en la vida, e implanten en nuestras mentes duda, miedo o indiferencia …

Dr. Edward Bach

1 comentario:

  1. Dejemos que nuestros hijos tengan la libertad de elegir, con ello serán seguros, independientes y sobre todo felices

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